Una Perspectiva desde la Fonoaudiología
¿Alguna vez te has preguntado qué significa realmente cuando se habla de un retraso en el desarrollo del lenguaje en los niños? Este término puede generar preocupación en los padres, pero entenderlo adecuadamente es clave para abordarlo de manera efectiva.
El retraso en el desarrollo del lenguaje se refiere a una situación en la que un niño adquiere habilidades lingüísticas de manera más tardía que otros de su misma edad, pero en el orden secuencial esperado. Por ejemplo, es común que las primeras palabras aparezcan alrededor del primer año de vida, pero en casos de retraso, este hito puede retrasarse hasta los dos años.
Una señal típica de retraso en el lenguaje es la unión de dos palabras, como “papá coche”, que suele ocurrir alrededor de los 18 meses. Sin embargo, en niños con retraso, esta etapa puede retrasarse hasta los tres años de edad.
Es importante destacar que el problema se limita al ámbito del lenguaje y no está relacionado con dificultades auditivas, bajo coeficiente intelectual, ni alteraciones neurológicas o síndromes. En otras palabras, el niño puede comprender y procesar el lenguaje de manera adecuada, pero experimenta dificultades en la adquisición y desarrollo de las habilidades lingüísticas.
Estas dificultades pueden manifestarse en varios niveles del lenguaje, incluyendo la comprensión, la expresión verbal, la estructuración de oraciones y la comunicación en general.
Si notas que tu hijo presenta signos de retraso en el desarrollo del lenguaje, es fundamental buscar ayuda profesional. Un logopeda o especialista en el desarrollo infantil puede realizar una evaluación exhaustiva y proporcionar intervenciones específicas para apoyar el desarrollo lingüístico del niño.
Recuerda que entender y abordar el retraso en el desarrollo del lenguaje a una edad temprana puede marcar una gran diferencia en el futuro desarrollo y éxito académico y social de tu hijo.